TPP: El secreto comercial de gobiernos poco transparentes
Cinco años de negociación recién las autoridades dieron a conocer detalles del TPP. Ahora el Gobierno intenta desmentir el secretismo, que ha sido una práctica común en los 12 países que se ufanan de ser democráticos.
Si la primera regla de juego para iniciar las negociaciones en los tratados comerciales, es mantener en reserva todo lo que se va a pactar, se podría decir que el negocio empieza mal.
Un país, como el nuestro que se ufana de haber aprendido del autoritarismo y tener una nueva democracia, nuestras autoridades no pueden negociar nuestra existencia y el supuesto desarrollo, sin que los “beneficiados” , Los 30 millones de peruanos, sepamos lo que realmente va a ser el resultado.
Esto pone a la ciudadanía en un sentimiento de desconfianza, de temor y por momentos sentirnos engañados y defraudados, cuando se nos dice que el Gobierno no tiene secretismos, aunque por 5 años se han reservado los textos del Acuerdo Transpacífico (TPP en sus siglas en inglés) y sus 30 capítulos que fueron negociados.
Cómo creer que nuestras autoridades han cumplido cabalmente en defender nuestros derechos, si siempre nos han demostrado que lo que dicen, dista mucho de lo que hacen o al revés.
Aquí se están superponiendo los derechos comerciales, antes que el derecho a la salud y la vida. El Perú fue más allá del TLC con los Estados Unidos al ceder 5 años de protección de Datos de Prueba para medicamentos biológicos y eso es una realidad, no un mito, como ahora promociona Mincetur para tratar de ensayar argumentos para los críticos del TPP.
Un tratado comercial, que supone intercambio en las economías, no tendría por qué negociar temas de propiedad intelectual de medicinas, cuando eso ya está estipulado en cada uno de los gobiernos con normas claras y precisas como la Comunidad Andina (CAN), la Declaración de DOHA y la Organización Mundial del Comercio (OMC). Incluso un capítulo de propiedad intelectual para medicinas, fue eliminado de las negociaciones del tratado que firmará Estados Unidos con la Unión Europea, porque hay temas que no se deberían tocar ni negociar, pues son temas que afectan directamente al fin supremo de cualquier sociedad: La vida humana.
Ver la salud como un negocio, significa inclinar la balanza entre la vida y la muerte, entre el bienestar y la enfermedad y aquí todos podemos perder.
El Presidente del Consejo de Ministros, Pedro Cateriano y el propio presidente Ollanta Humala, han negado que el Gobierno actúe bajo secretismos, pero en la práctica lo hizo, también ha manifestado que el Congreso de la República deberá debatir ampliamente el acuerdo. Claro, el Congreso debatirá un acuerdo que otros negociaron a espalda de la ciudadanía y que ya no se podrá corregir en sus textos, pues se aprueba o no, así de simple.
Para sacudirse del tema del ocultamiento de información la Ministra de Comercio Exterior Magali Silva, dijo durante su exposición en la Comisión de Salud del Congreso de la República que han sostenido 29 reuniones para informar sobre el TPP.
En realidad, convocar a algunas organizaciones e informar de manera general, no significa ser transparentes, ya que si no se ponen las cartas sobre la mesa y se debate punto por punto, las reuniones significan un tremendo disfraz de lo que debe significar un debate sin ocultar información sobre lo que nos conviene o no informar.
Si no existieran puntos controversiales, si el TPP es la maravilla del desarrollo económico comercial del país, porqué actuar bajo sombras, porque hablar al oído entre poderosos y no tener apertura hacia los demás. ¿Cuál pudo haber sido el motivo para que la ministra Silva y los negociadores se pongan una cinta en la boca y callen de manera grosera y ahora salgan a defenderse tras haber culminado los acuerdos el pasado 5 de octubre.
El Perú, no está obligado a firmar un acuerdo, donde sus ciudadanos no conocían de su negociación, mucho más aún cuando hay medias verdades y ambigüedades. La verdad es que la ciudadanía sabe más del TPP por los textos filtrados por wikileaks que por sus propias autoridades, que más defienden normas como las de reserva de información, antes que dar a conocer y trabajar para los ciudadanos.
El Perú, antes de iniciar una negociación comercial, debe marcar el camino y explicar que nadie puede negociar en secreto a espaldas del pueblo, porque se trata de nuestras vidas.
Escrito por
Periodista, con experiencia en el campo de la información, relaciones públicas y realización de campañas de comunicación.
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Noticias por doquier